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Medicamentos para controlar la placa y la gingivitis
La clorhexidina es un antibiótico utilizado para controlar la placa y la gingivitis en la boca y en las bolsas periodontales (el espacio entre los dientes y las encías. Este tipo de medicación se toma a través de enjuagues orales.
Nota importante: La clorhexidina puede provocar un aumento del sarro en tus dientes. También puede causar la decoloración de los dientes, de los empastes o de las dentaduras. Cepillarse los dientes con una pasta dental anti-sarro y pasarse el hilo dental a diario puede ayudarte a reducir esta acumulación de placa y manchas. Además, debes visitar al dentista cada 6 meses para que te examine los dientes y encías. Estas visitas son una buena oportunidad para informarle de alguna reacción alérgica a esta medicina.
Antiséptico
Puede que tu dentista te recomiende el uso de un antiséptico para la boca para reducir la placa y la gingivitis y matar los gérmenes que causan el mal aliento.
Medicamentos para prevenir la caries dental
El flúor se utiliza para prevenir las caries dentales y se encuentra en la inmensa mayoría de pastas dentífricas. Es absorbido por los dientes y ayuda a fortalecerlos y a resistir el ácido y la acción de las bacterias. Sea en forma de barniz o de enjuague oral, el flúor también ayuda a reducir la sensibilidad oral. Por otro lado, el flúor también puede rectarse en forma líquida o sólida masticable. Normalmente se toma una vez al día.
Nota importante: No debes tomar suplementos de calcio, magnesio o hierro mientras tomas flúor. Tampoco debes tomar productos lácteos una hora antes de tomar la cantidad de flúor diaria. Por último, ten en cuenta que un exceso de flúor puede manchar tus dientes de manera intrínseca.
Medicamentos para la boca seca
Existen varios medicamentos que se utilizan para estimular la producción de saliva en pacientes que padecen el síndrome de la boca seca o xerostomía.
Otros antibióticos
La tetraciclina ( y sus derivados) se puede utilizar solo o en combinación con una cirugía u otras terapias para reducir o eliminar temporalmente las bacterias asociadas con la enfermedad periodontal, para evitar la destrucción del hueso que soporta el diente o para reducir el dolor y la irritación provocados por las llagas. Este tipo de antibiótico puede tener forma de gel o enjuague.
Los relajantes musculares pueden recetarse para reducir el estrés y ayudarte a parar de rechinar los dientes o tratar problemas de la articulación temporomandibular.
También se pueden recetar antifúnguicos para tratar la candidiasis oral. El objetivo del tratamiento es frenar el avance del hongo cándida.
A pesar de que algunos de los medicamentos utilizados en odontología se pueden conseguir sin receta médica, es importante que lleves a cabo un consumo responsable y sigas los consejos del odontólogo en cada caso.
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